2-0 Sin más

El partido contra el Villarreal no va a pasar a la historia, ha sido un partido de esos del monton que pierdes sin haber hecho el ridículo pero merecidamente. El Villarreal mereció la victoria, los de Sandoval (que acabó expulsado) salieron dormidos al cesped del Madrigal, y lo pagaron caro, a los 20 minutos Bruno Soriano remató casi a placer un corner para hacer el 1-0. El dominio era del submarino sin que el Rayo pudiera reaccionar. Casi al final de la primera parte De Guzmán se tiraba a la piscina y engañaba al arbitro que pitó penalty, menos mal que Cobeño sacó una mano salvadora en el que fue un gran paradón. Sin mucha más historia el partido llegó al descanso. Ya en la segunda parte el Rayo se estiró más y tuvo mas posesión, entre Lass, Piti y Michu elaboraron algunas jugadas, pero no llegaron a conectar bien con Koke, que suplió a un Tamudo lesionado en la primera parte. Pero justo cuando el Rayo empezaba a carburar llegó el gol desde fuera del área de Borja Valero que dejó tocado y casi hundido al Rayo. Solo una ocasión clara de Piti que se fué rozando el palo fue lo único destacable para que el Rayo pudiera meterse en el partido. Al final entre unos y otros dejaron que el tiempo se agotase se certificase la derrota. Derrota de la que no se pueden sacar muchas conclusiones, simplemente un partido más que no te deja condicionado, si no que sirve para recordarte quien eres y donde estas. Ahora solo queda pasar página y centrarse en el partido frente a la Real Sociedad el próximo domingo.